La vida en el s.XXI: ¿Hedonismo o significado?

Estamos siendo bombardeados con la exigencia de derechos y libertades, que aparentemente nos traerán la felicidad. Paradógicamente, esto ha traído al individuo de a pie un mayor vacío e infelicidad, a menudo compensados con conductas como el sexo, compras, likes, etc. que aumentan la felicidad temporalmente a base de dopamina. Pese a que a primera vista una lucha por más derechos y libertades es correcta y necesaria, siempre falta una contraparte vital para que estas libertades se sientan de un forma gratificante y justa: una actitud responsable ante los mismos, que se expresa en esfuerzo y sacrificio.

Un ejemplo fácil relacionado con esto es la diferencia entre algo ganado con el sudor de tu frente y algo regalado: lo que ha costado esfuerzo se aprecia más que aquello que no ha requerido ningún sacrificio. Comunes son ya los casos de personas de éxito como artistas o empresarios millonarios y famosos (e incluso de los hijos que heredan sus fortunas), que acaban sintiéndose vacíos ante la falta de retos en la vida y terminan consumiendo drogas, teniendo conductas de riesgo… con tal de sentir algo. Una vida con sentido necesita del esfuerzo y del sacrificio para que los frutos tengan sabor al ser recogidos.

Gracias a la tristeza apreciamos la alegría. De la misma forma, gracias al esfuerzo y el sufrimiento apreciamos el placer y la satisfacción en la vida.

El significado se encuentra en el equilibrio, en la delgada línea de los derechos y las responsabilidades: coge la responsabilidad más grande que puedas llevar sobre los hombros, y cárgala con esfuerzo y orgullo. Esta decisión es valiente, y trae consigo dolor y sacrificio. Sin embargo, si estás orientado a tu mayor responsabilidad, cualquier dolor es vivido como parte del camino para llegar a la meta. De forma parecida a cuando haces deporte, tú no te fijas únicamente en el dolor y el cansancio, si no en la meta a conseguir y el bienestar que trae. Como dice el dicho: ‘sarna con gusto no pica’.

Si no luchas por tener una vida con sentido y significado, lo único que habrá es sufrimiento, nihilismo, y desesperación al probar los frutos insípidos de la vida que no te esforzaste en cultivar y cuidar, día a día.